En el semidesconfinamiento previo a la nueva realidad, sigue destacando el confinamiento previo: la prisión del móvil. El caballito mira, sin hallar respuesta, mientras la espalda del viandante parece indicar el futuro. Me gusta la foto. Y sí, ya sé que la traduzco según un lenguaje mío.
El encuadre y la composición son estupendos, a lo que hay que añadir la magnífica luz que tu tan bien saber pillar, ese blanco y negro impecable y por supuesto una instantánea de lujo. Un abrazo Josep
Una gran foto de calle con una luz muy especial y que retrata la realidad presente, tecnología y mascarillas para enfrentar la peste. Un abrazo y cuidaos
En el semidesconfinamiento previo a la nueva realidad, sigue destacando el confinamiento previo: la prisión del móvil. El caballito mira, sin hallar respuesta, mientras la espalda del viandante parece indicar el futuro. Me gusta la foto. Y sí, ya sé que la traduzco según un lenguaje mío.
ResponEliminaAbrazo grande, Josep.
La rutina diaria y por mucho tiempo.
ResponEliminaCuídate.
Un abrazo.
El encuadre y la composición son estupendos, a lo que hay que añadir la magnífica luz que tu tan bien saber pillar, ese blanco y negro impecable y por supuesto una instantánea de lujo.
ResponEliminaUn abrazo Josep
Estupenda Josep
ResponEliminaMe gusta mucho esa foto, preciosa.
ResponEliminaUna gran foto de calle con una luz muy especial y que retrata la realidad presente, tecnología y mascarillas para enfrentar la peste.
ResponEliminaUn abrazo y cuidaos