Bien podría ser el cartel anunciador de una película de espías o cine negro. Eso sí algunos espías, motorizados en plan moderno. Será para pasar desapercibidos ... Un fuerte abrazo.
Una de las impresiones que me llevé del rato que pasé en la Boquería es que allí uno podía encontrar de todo, pero nunca pensé en un espía (lo que tu y tu cámara no encontréis...)
Tiene todo el misterio necesario para que uno se sienta como partícipe de una novela de espionaje a la vieja usanza. Genial. Que voy a decir, una vez más, de tu control sobre las luces? No hay nada que decir. Un abrazo Josep
Así parece, un submundo de sombras en el que apenas dibujados por una pincelada de luz los personajes parecen observarnos ocultos tras sus gafas oscuras. Maestría total. Un abrazo,
Bien podría ser el cartel anunciador de una película de espías o cine negro. Eso sí algunos espías, motorizados en plan moderno. Será para pasar desapercibidos ...
ResponEliminaUn fuerte abrazo.
Una de las impresiones que me llevé del rato que pasé en la Boquería es que allí uno podía encontrar de todo, pero nunca pensé en un espía (lo que tu y tu cámara no encontréis...)
ResponEliminaTiene todo el misterio necesario para que uno se sienta como partícipe de una novela de espionaje a la vieja usanza. Genial.
ResponEliminaQue voy a decir, una vez más, de tu control sobre las luces? No hay nada que decir.
Un abrazo Josep
Todo un cartel de misterio que podría anunciar una película.
ResponEliminaBesos
Así parece, un submundo de sombras en el que apenas dibujados por una pincelada de luz los personajes parecen observarnos ocultos tras sus gafas oscuras. Maestría total.
ResponEliminaUn abrazo,
Eso es aprovechar el rayo de sol y lo demás son tonterías.
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