Me gusta la incorporación de la joven pues humaniza aún más si cabe la figura del entrañable seiscientos. De no haber sido así hubiera parecido una fría pieza de museo, un elemento para el recuerdo; de este modo podemos verlo mezclado con la gente que es para lo que nació. Un abrazo,
La modernidad de la joven contrasta con la antigüedad del coche.
ResponEliminaBesos
Dos épocas unidas en tu foto. Que recuerdos más buenos nos dejó este pequeño 600.
ResponEliminaBuen fin de semana.
Un abrazo.
Bonito contraste entre lo moderno y lo antiguo
ResponEliminaVaig molt a Raima i es curios veure un cotxe d´aquest tipus a la entrada.
ResponEliminaBona foto.
Salutacions.
Tanmateix crida molt l'atenció. Hi ha molta gent que s'hi atura i fa fotos.
EliminaUna abraçada
Los ojos se me van a mi "seillas" y mis recuerdos.
ResponEliminaMuy guapa Josep, el encuadre con el enfoque al morro del 600 es genial.
ResponEliminaUn abrazo
Me gusta la incorporación de la joven pues humaniza aún más si cabe la figura del entrañable seiscientos. De no haber sido así hubiera parecido una fría pieza de museo, un elemento para el recuerdo; de este modo podemos verlo mezclado con la gente que es para lo que nació.
ResponEliminaUn abrazo,
El 600 y minifalda en un encuadre de calidad. Gran toma sesentera.
ResponEliminaUn abrazo.